Puedes tener rasgos de una personalidad proactiva, bien por tus habilidades naturales, o bien, porque pones energía en aprender actitudes para conseguirlo.
La persona proactiva se reconoce porque:
Sabe de sus fortalezas y sus debilidades.
Maneja sus emociones.
Es Asertiva.
Confía en sí misma.
Asume retos.
Dinámica.
Orientada para alcanzar sus metas.
Los cambios y la incertidumbre son parte de la vida.
Trata de transformar los problemas en oportunidades.
Perseverante.
Los fracasos son aprendizaje.
Es creativa.
Inconformista.
Visionaria.